La colleja es una de
las plantas nutricias autóctonas, muy reconocida en Priego de Córdoba, pertenecen a la familia de las
cariofiláceas de hojas lanceoladas, blanquecinas y suaves, tallos ahorquillados
y flores blancas en panoja colgante.
Es muy común en los sembrados,
lindes y pies de olivos. Se suelen recolectar al final de invierno o primavera . Hay que hacerlo
antes de que estén “subidas”, es decir, sin que lleguen a medir unos ocho
centímetros puesto que se endurecen y se preparan para florecer.
Otra observación de interés es
recolectarlas donde no se hayan depositado abonos por la posible toxicidad que
adquieran.
Por excelencia las podemos encontar en toda la región mediterránea, pudiendo consumirse las
hojas y los tallos tiernos, incluso en crudo.
Es una verdura muy fina, hasta el
punto de que ni siquiera suele ser necesario eliminar el agua de cocción para
consumirlas.
El hervido previo es recomendable para reblandecer los tejidos de la
hoja, aunque no es necesario.
Puede emplearse en guisos, hervida, en ensalada, en revuelto o incluso en tortilla, bastando sofreír previamente las hojas, con o sin cocción
preliminar.
Su empleo como verdura tradicional se ha ido abandonando con el tiempo,
probablemente por lo laborioso de su preparación, ya que las hojas deben
separarse los tallos de una en una.
Ingredientes: 800 gr de collejas limpias y hervidas, 4 huevos, 4 dientes
de ajo, gambas crudas peladas, jamón serrano en taquitos, sal, Aceite
de Oliva Virgen Extra “preferiblemente” de la Denominación de Origen de Priego
de Córdoba.
Elaboración: Limpiar las collejas quitando las partes duras y las pequeñas
raíces, lavarlas muy bien, escurrirlas e introducirlas en un recipiente con
agua hirviendo y sal, dejarlas hervir unos 3 minutos. Sacar, escurrir y
reservar.
Posteriormente pelar y laminar los dientes de ajos, en una
sartén, rehogarlos un par de minutos con un poco de aceite de oliva virgen
extra.
Agregar el jamón serrano picadito y las collejas, marear en la sartén.
Batir los huevos,
poner una pizca de sal y mezclarlos con las collejas, junto con las gambas. Remover,
tapar y retirar del fuego.
No conviene que se haga mucho para que el resultado
sea más jugoso.
Servir rápidamente.
Nota: Escoger collejas recién recolectadas y lavarlas concienzudamente si son silvestres.
No exceder el tiempo de cocción más de 3 minutos y si es menos cantidad será necesario menos tiempo.
Una vez hervidas las podemos congelar en un recipiente hermético o en bolsas destinadas a este uso.