¡Hola amig@s!
Una tarta crujiente, con unas láminas de masa fina horneadas similares al hojaldre, rellena de una crema de vainilla con leche condensada, mantequilla y con un resultado espectacular.
La de hoy es una tarta especial… Tanto que la he preparado para mi cumpleaños.
Así que hoy es un día perfecto para tener una sonrisa GRANDE, adtitud positiva, mente tranquila y CORAZÓN AGRADECIDO por cumplirlos con salud.
Y si me lo permitís voy a pensar un deseo para soplar mi vela, pues celebrarlo con tod@s vosotr@s será un placer.
Ingredientes de la crema: 220 ml leche entera, 50 g azúcar, 1 vainilla en rama o una cucharita de vainilla líquida, 2 yemas, 20 g harina de maíz (maicena), 175 g mantequilla sin sal, 125 g leche condensada, una pizca de sal.
Elaboración de la crema: En un recipiente poner las 2 yemas y el azúcar.
Agregar las semillas de una rama de vainilla o la vainilla líquida y batir todo.
Incorporar la maicena. Mezclar.
Añadir a la mezcla la leche hirviendo.
Remover y verter la mezcla en un cazo.
Llevar el cazo a fuego medio alto, sin parar de remover. Cocer la crema hasta que espese. Remover enérgicamente para que no se pegue.
Pasar la crema a un recipiente y cubrirla con un trozo de film transparente. Es importante que el film quede en contacto con la crema para que no se forme costra.
Dejamos enfriar a temperatura
ambiente.
Ingredientes de la masa: 140 g mantequilla sin sal, 225 g harina de trigo, 100 g yogur natural sin azúcar, 1 huevo mediano, una pizca de sal fina.
Elaboración de la masa: Tamizar la harina y añadir una pizca de sal.
Rallar la mantequilla congelada embadurnándola con harina constantemente para que no se funda con el calor de nuestras manos. Es importante que la mantequilla esté congelada, que haya pasado en el congelador al menos 2 - 3 horas.
Hacer un hueco en el centro, añadir el yogur frío y 1 huevo frío.
Mezclar el yogur con el huevo, la mantequilla rallada y la harina, haciendo la masa.
Esta masa no hay que amasarla, solo hay que unir todo en una bola lo más rápido posible como ves en las fotografías y preferiblemente trabajarla en una habitación fría, sobre una superficie fría, pues es importante que los pétalos de mantequilla no se derritan.
Dividir la masa en 7 trozos del mismo peso y hacer bolitas. Colocar las bolitas en un recipiente. Debemos hacerlas rápido, para que no se nos calienten entre las manos y cerrar el recipiente.
Reservar en el frigorífico durante 1 hora.
Encender el horno a 220º C con calor arriba y abajo. Si no tienes esta función, pon el calor sólo de abajo. Precalentar el horno al menos 20 minutos.
Sacar de la nevera 1 bolita de masa. Espolvorearla con un poco de harina y con ayuda de un rodillo estirarla lo más fina posible sin que se rompa.
Ponerla en la bandeja forrada con papel para hornear y llevarla al horno hasta que se dore, unos 7 u 8 minutos aproximadamente, el tiempo dependerá del grosor que le dejes y de tu horno.
Poner la lámina obtenida en una rejilla, para que se enfríe.
De la misma forma estiramos y horneamos las otras 6 bolitas de masa restante.
Recortar la lámina del tamaño de la tarta, con ayuda de un plato de 22 centímetros.
Los restos los reservamos, los vamos a necesitar para la decoración.
Terminación de la crema: Montar con unas varillas eléctricas la mantequilla hasta que se vuelva blanquecina, (la mantequilla debe estar muy blanda).
Añadir la mitad de leche condensada e integrarla.
Incorporar la leche condensada
restante y batir.
Agregar en 2 o 3 veces la
crema pastelera y seguir batiendo.
En la última tanda de crema pastelera añadir una pizca de sal.
Montaje de la tarta: Montar directamente en el plato en el que se va a servir. Para no mancharlo, cubrirlo con trozos de papel de horno.
Poner en la primera lámina 1 cucharada de crema y repartirla. Hacerlo con cuidado, para no romper las láminas de la masa pues son muy frágiles.
La crema es bastante espesa pero ha de ser así para que las láminas de la masa se mantengan crujientes. Aunque lo parezca, no es poca crema, habrá suficiente.
Con los restos de la crema untar los bordes.
Desmenuzar los recortes haciendo migas.
Espolvorear la tarta con la miga por arriba y los lados.
Retirar los papeles de no manchar.
Antes de servir, reservar la tarta en el frigoríficoun par de horas.
Notas: Puedes sustituir la leche por nata líquida.
La harina que he usado para elaborar las láminas de hojaldre, es la de trigo de todo uso.
El paso de las láminas es un poco entretenido de elaborar, pero no es difícil, de hecho puedes terminar la tarta en un día, como hice yo.
Conserva la tarta en el frigorífico y déjala atemperar fuera unos 20 minutos antes de tomarla.
El segundo día no es tan crujiente, pero igualmente está muy buena.
Usa todos los ingredientes de buena calidad, no escatimes en un pastel tan apetecible como este.
Te darás cuenta que merece la pena el tiempo dedicado a esta tarta, al saborearla.
Hola Isabel!. Lo primero desearte pasaras un muy buen día y que tu deseo se cumpla. En cuanto a la tarta tiene una pinta buenísima y seguro que también lo estará.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Hola Concha.
EliminarPues sí estaba muy buena, anímante aprepararla.
Gracias.
Un saludo.
Querida Isabel. Felicidades de nuevo.
ResponderEliminarEres una gran repostera y este milhojas me parece una locura. No puedo comer dulce, pero ya te digo que un buen trozo me tomaría.
Muchos besos.
Muchas gracias Marisa, tú siempre tan amable y cariñosa.
EliminarUn abrazo.
Muchas gracias!!
ResponderEliminarEs una presentación un poco diferente y original.
Un saludo.
Your cake sounds absolutely divine, especially with that creamy filling made from scratch. I can almost taste the rich flavors of vanilla and condensed milk coming together in perfect harmony. Be sure to visit my blog at Melody Jacob Blog. Cheers to you!
ResponderEliminarThank you for your visit and nice words Melody... Yesssssss, that's really good.
EliminarAll the best.