Esta es una crema de mantequilla y merengue, ligera, cremosa y se puede hacer muy variada en sabores.
Es perfecta para rellenar tartas. No es imprescindible conservar las tartas hechas con buttercream en la nevera. Si lo es en verano, en invierno vasta dejarla en un lugar fresco.
También se puede congelar y conservarla hasta 1 mes en el congelador. En ese caso has de dejarla 24 horas descongelándose en la nevera. Antes de usarla tienes que dejarla a temperatura ambiente, para que no se corte.