El rabo de toro es un guiso típico cordobés de estofado de rabo de vaca o toro.
Se trata de una preparación típica que consiste en dejar cocinar bastante tiempo la carne y que se prepara frecuentemente en diversas cocinas andaluzas.
Su origen en la cocina española se sitúa el siglo XVI en Córdoba, que
en sus inicios se preparaba con los rabos de toros bravos, tras la corrida.
Debido a la fama que fue adquiriendo, se fue instalando en el resto de ciudades españolas.
Hay que tener en cuenta que el rabo de toro de lidia es un producto escaso y de tiempo definido, lo que le convierte en un producto muy solicitado y de precio elevado.
Es por esto que cuando preparo esta receta, generalmente suele ser de añojo, ternera o buey, que encuentro fácilmente en la carnicería.
Ingredientes:
(4 personas) 1 rabo de toro, aproximadamente
2 kg, 3 o 4 cebollas finamente picadas, 4 tomates, 5 dientes de ajo, 600 gr de zanahorias, pimienta en grano, sal, azafrán enhebra, 3
hojas de laurel, 1 vaso de coñac, 1 vaso de buen vino blanco (Montilla o
Moriles), aceite de
oliva.
Elaboración: Preparar un
sofrito con la cebolla, ajo, pimienta en grano, azafrán enhebra, laurel y
los tomates, que los echaremos cuando la cebolla ya este blandita.
Quitar el sebo que pueda tener
el rabo de toro y partir en trozos por las articulaciones.
Enharinar y dorar en unas cucharadas de aceite el rabo de toro, en una
olla (preferiblemente a presión o programable).
Añadir el sofrito
a la olla junto con el rabo, las zanahoria en rodajas gorditas, un poco de sal, una copa de coñac y un vaso de vino blanco y
cubrir con agua.
Tapar la olla y cocinar a fuego medio aproximadamente sobre 1 hora o hasta que la carne este tan tierna que se separe del hueso.
Nota: Yo lo cociné en mi olla programable, se puede preparar en olla a presión o en una olla normal, si esta última es tu elección, deberás dejarlo guisar a fuego lento unas tres horas para que la carne quede tierna.