Hoy vamos a preparar unas clásicas magdalenas caseras con copete alto, que te van a sorprender por lo tiernas, suaves y esponjosas que quedan.
Ingredientes: 2 huevos L, 130 g de azúcar, 80 g de aceite de oliva suave, 120 g de leche, 170 g de harina común tamizada, 8 g de levadura química, ralladura de naranja o de limón.
Azúcar, canela molida o pepitas de chocolate para espolvorear.
Capsulas de papel medianas para hornear.
Elaboración: Es muy importante que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente, pesar todos los ingredientes en gramos y respetar las cantidades.
Poner lo huevos en un bol, batirlos para que espumen un poco y agregar el azúcar poco a poco y en forma de lluvia para que se disuelva.
Continuar batiendo a velocidad media-alta hasta que aumenten de volumen y blanqueen llegando al punto cinta.*
A continuación, añadir el aceite de oliva poco a poco. Batir durante 1 minuto aproximadamente para incorporarlo en la mezcla.
Agregar la leche, batir solo un poco para que se integre con los demás ingredientes.
Poner la ralladura de naranjo o de limón. Mezclar.
Poner la levadura en la harina y remover con una cuchara para mezclarla.
Añadir al bol la mitad de la harina tamizada para airearla y que no forme grumos sobre el batido anterior, mezclar suavemente hasta que se integre.
Es importante no batir demasiado, solo hasta que se integre.
Incorporar el resto de la harina tamizandola, remover hasta integrar.
Tapar el bol con un papel film y dejar reposar en el frigorífico unas 2 horas.
Pasado el tiempo, precalentar el horno a 200ºC con calor arriba y abajo.
Sacar la mezcla del frigorífico y remover un poco.
Preparar una bandeja para hornear magdalenas, colocar en ella las capsulas y rellenar los moldes 3 cuartas partes de su capacidad.
Espolvorear por encima de forma generosa una capa de azúcar y o canela, o pepitas de chocolate.
Hornear durante 15 minutos o hasta que estén doradas.
Una vez salidas del horno, dejarlas reposar 5 minutos y ponerlas sobre una rejilla para que se enfríen por completo.
Notas: *Punto cinta - Es cuando al levantar las varillas, la mezcla cae de forma continua como una cinta, sin deformarse.
Al espolvorear el azúcar, si te gusta, puedes poner también un poco de canela molida o unas pepitas de chocolate, según tu gusto.
Si no te gusta el sabor a naranja o limón, puedes sustituirlo por un poco de vainilla líquida o en polvo.
El molde que ves arriba en la foto para hornear magdalenas es importante, porque ayuda a distribuir el calor alrededor de las capsulas y las hace crecer hacia arriba, consiguiendo que tengan un copete más alto.
Puedes conservarlas en un recipiente hermético y se mantendrán tiernas varios días.
También las puedes mantener en el congelador durante un par de semanas, guardandolas en una bolsa de congelación muy bien cerrada.