El membrillo es una fruta con
un escaso contenido de azúcares, y por tanto un bajo aporte calórico. El
inconveniente que presenta es que en la mayoría de las ocasiones se consume en
forma de "dulce o carne de membrillo", que lleva adicionado azúcar, por lo que el
valor calórico de este producto se dispara.
De su contenido nutritivo destaca
el potasio y cantidades discretas de vitamina C. Las propiedades saludables del
membrillo se deben a su abundancia en fibra. También contiene ácido málico,
ácido orgánico que forma parte del pigmento vegetal que proporciona sabor a la
fruta.
Los membrillos frescos son difíciles de comer, tienen una textura un poco reseca y poseen un aroma increíble.
Una vez cocidos cambian de color y textura, y se convierten en un dulce delicioso. Y además muy fácil de hacer.
Bien, pues os dejo con la elaboración un paso a paso en fotografía, con las manos de mi querida mamá, que es ella quien me enseñó la receta y que cada año cocinamos juntas.
Ingredientes: 1 kg de membrillos maduros, 850-1000 g de azúcar blanquilla, el zumo de 1/2 limón.
Elaboración: Lavar y pelar los membrillos.
Cortar la pulpa del membrillo en trozos, que iremos rociando con el zumo de limón a medida que los ponemos en un bol. Agregar el azúcar y remover para que se mezcle bien.
Si se desea, podemos dejar el membrillo macerando 2 o 3 horas. Este macerado ablanda la fruta y libera jugos, lo que facilita la cocción.
Pasado este tiempo, poner todo el conjunto del membrillo con el azúcar a cocer en una cazuela grande de fondo grueso, para que difunda bien el calor.
Cocemos el membrillo durante 50 minutos, observaremos que la mezcla va cambiando poco a poco de color, cogiendo un color cobrizo, señal de que el membrillo se va haciendo correctamente.
Cuando estemos llegando al final de la cocción, el almíbar estará ya bastante espeso, pasaremos una batidora para triturar el membrillo, que ya estará blandito.
Mucho cuidado con las salpicaduras, que queman muchísimo.
Para probar si está listo yo hago lo siguiente, meto un plato pequeño en el congelador mientras que se cocina el dulce de membrillo, no tenemos más que sacar al plato una pequeña porción con una cuchara y dejarla un momento, si solidifica, y se despega del plato con facilidad, entonces el dulce de membrillo está hecho.
Ingredientes: 500 gr membrillos lavados, sin pelar y sin pepitas, un chorro de limón, 450 o 500 gr azúcar.
Elaboración: Poner todos los ingredientes en el vaso y programar 30 segundos, velocidad progresiva 5 - 10.
Con la espátula, bajar los restos de fruta de la tapa y del interior del vaso hacia las cuchillas.
Con la espátula, bajar los restos de fruta de la tapa y del interior del vaso hacia las cuchillas.
Programar entre 35-45 minutos (según la textura que quieras conseguir), 100º, velocidad 4, retirar el cubilete para que evapore y se caramelice.
Colocar el cestillo apoyado en sus 4 patitas sobre la tapa para evitar salpicaduras.
Verter la mezcla en un recipiente y dejar enfriar en un lugar fresco.
Nota: Si después de triturar aún vemos el dulce un poco blando, podemos seguir cociendo, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera porque al final se puede pegar algo en el fondo si está muy espeso o si el calor del fuego es muy fuerte.
Cuando esté el dulce suficientemente espeso lo vertemos en el recipiente elegido.
Podemos untar el molde con una finísima capa de aceite de oliva para facilitar un poco el desmoldado o usar recipientes de plástico o de silicona, que permiten despegar muy bien el membrillo.
Cuando se enfríe por completo lo guardamos en el frigorífico para que acabe de asentarse.
El dulce de membrillo se conserva estupendamente en el frigorífico durante meses por la enorme concentración de azúcar que lleva, que actúa como conservante. Solo es aconsejable mantenerlo bien tapado en un recipiente hermético, porque tiende a resecarse.
Y si quieres hacer una mermelada de membrillo, solo tienes que reducir la cantidad de azúcar a 75-80% respecto al peso de membrillo, te quedará una mezcla untable en lugar de un dulce de membrillo y obtendrías una deliciosa mermelada de membrillo.
Debes tener en cuenta que no se conservaría durante tanto tiempo como el dulce de membrillo.
Que cosa más rica, ADORO el dulce de membrillo. La última foto es preciosa, dichosa dieta, lo que daría yo ahora mismo por poder comerme todo lo qu ehay sobre la tabla jajaja
ResponderEliminarUn besote
Te ha quedado una carne de membrillo espectacular!! como la has puesto tu con el queso ummmm ¡delicioso!
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