Lavar unas cuantas patatas no muy grandes.
Introducir el descorazonador más o menos hasta la mitad.
Sacar la parte que queda suelta.
Repetir la misma operación con las demás patatas.
Esta es una atractiva forma de decorar tus platos y una divertida manera para animar a los peques a comer.
Me han encantado esas setas tan originales, estas me las apunto para decorar un plato, quedan chulisimas.Besos.
ResponderEliminarLas setas son super originales, la imaginación al poder. Un plato delicioso.
ResponderEliminarFelicidadespor tus patatas....son originales y algo que no había visto nunca.....Un beso y Feliz Año..Bea
ResponderEliminarBueno Ana, Silvia y Bea, espero verlas pronto en algun platito de tu blog.
ResponderEliminarBesos para las tres.
Isabel como al resto de blogueras me han encantado las patatas, que además de chulas me las comíoa ahora mismo pero que conste también que la pechuga tiene muy buena pinta.
ResponderEliminarAbrazos.
Que chulada me creí en la primera foto que eran setas de verdad, jajaja
ResponderEliminarQue arte hija...
Un beso
Gracias Chari.
ResponderEliminarSeguro que a tus niños les encanta, Angel decía cuando se las puse que eran las casitas de los duendes... Que imaginación ¿A quien habrá salido?
Un abrazo.
Pásate por mi blog a recoger un regalito para ti
ResponderEliminarBueno, qué gracia tiene las patatas ... he tardado unos instantes en darme cuenta, mientras pensaba que no conocía esa seta
ResponderEliminarBesos. Ana
Gracias Mar.
ResponderEliminarYa imagino lo que es, voy para ya...
Un beso.
Que gracia, Ana.
ResponderEliminar¿Deveras has pensado que eran setas?
Igual puedes quedarte un día con tu familia, si se las sirvses en un plato sin decirles nada.
Eso si, para hacerlas más reales, hazlas con patatas pequeñitas.
Será divertido...
Besos.